Este efecto, se trata de otro fenómeno que, al igual que la radiación de cuerpo
negro, también involucra la interacción entre la radiación y la materia.
Pero esta
vez se trata de absorción de radiación de metales.
Heinrich Hertz (1857-1894), científico alemán, fue el primero en observar el efecto
fotoeléctrico, en 1887, mientras trabajaba en la generación de ondas de radio.
Informó esta observación pero no se dedicó a explicarla.
Al incidir luz ultravioleta sobre el cátodo metálico (fotocátodo) se detecta el paso
de una corriente eléctrica.
Se trata de electrones que abandonan el cátodo
(colector) y se dirigen al ánodo a través del vacío dentro del tubo.
Los electrodos se hallan conectados a una diferencia de potencial de sólo unos
pocos voltios.
La teoría electromagnética clásica considera que la radiación de mayor intensidad
(o brillo, si es visible), que corresponde a ondas de mayor amplitud, transporta
mayor energía.
Esta energía se halla distribuida uniformemente a lo largo del frente de onda. La
intensidad es igual a la energía que incide, cada unidad de tiempo, en una unidad
de superficie.
Con radiación ultravioleta de diferentes intensidades, los electrones salen del
metal con la misma velocidad.
La radiación más intensa arranca mayor número de electrones. Esta observación
también resultaba inexplicable.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario